José Rodríguez Sojo – El Confidencial
La crisis del coronavirus es también una crisis económica. El confinamiento se llevó por delante más de un millón de empleos y, por el momento, no hay rastro de la recuperación en V que muchos esperaban como agua de mayo. El mercado laboral tuvo un conato de remontada en julio, pero los rebrotes en plena temporada turística dieron la puntilla a la hostelería y revirtieron la tendencia, hasta el punto de que el número de parados registrados en las oficinas del SEPE creció en 29.780 personas el pasado mes de agosto.
La segunda parte del drama está aún por llegar. Más de 800.000 personas permanecen incluidas en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y corren el riesgo de no recuperar su trabajo, pues la mayor parte de los puestos se relacionaba con el turismo, sector que no verá brotes verdes, al menos, hasta Semana Santa, si es que por entonces la situación epidemiológica permite la movilidad de viajeros.
No obstante, hay sectores laborales que han resistido los azotes de la pandemia e, incluso, algunos que han salido reforzados. Es el caso del ámbito sociosanitario, el área que más incrementó la ocupación durante el mes de agosto, con 31.795 afiliados a la Seguridad Social. Según datos del INE, entre el 12 de marzo y el 31 de agosto, las actividades relacionadas con la salud y la atención social aumentaron el número de empleados en un 3,92%, porcentaje que contrasta, por ejemplo, con el sector educativo, que antes de empezar el curso escolar tenía un balance negativo del -15,86%.
Además de médicos, enfermeros y auxiliares, el mercado demanda puestos tecnológicos de alta especialización, comerciales y técnicos de atención al cliente, según los datos aportados a este periódico por los principales portales de búsqueda de empleo en España.
Las industrias que más puestos de trabajo han generado en LinkedIn durante los últimos meses son los servicios de ‘software’ y tecnologías de la información, los servicios corporativos, la manufactura, la sanidad y las finanzas. «La comunicación encabeza la lista de las competencias más demandadas, tanto a nivel local como global. Y, concretamente en España, vemos por las ofertas publicadas que las empresas buscan profesionales que dominen, además de buenas competencias de comunicación: administración de empresas, resolución de problemas, ciencia de los datos, tecnologías de almacenamiento de datos, soporte técnico, liderazgo, gestión de proyectos, alfabetización digital y aprendizaje y desarrollo de empleados», detalla Ángel Saénz, director general de LinkedIn en España y Portugal.
«En un momento en el que muchas empresas han decidido suspender sus procesos de selección, evidentemente, la búsqueda de empleo se complica. Sin embargo, a pesar de lo difícil de la situación hay numerosos sectores que han seguido contratando, y algunos que incluso han aumentado sus necesidades de personal como consecuencia de la crisis», sostiene Naiara Reig, responsable editorial de Welcome to the Jungle. En su plataforma, las principales ofertas se relacionan con servicios de atención al cliente, gestión de servicios a domicilio, logística, análisis de datos, ciberseguridad y, de nuevo, sanidad.
Las conclusiones son parecidas en InfoJobs. De las 93.682 vacantes disponibles en el mes de agosto, el sector comercial y de ventas acaparó el 22%. Por detrás aparecen la atención al cliente, área que demandaba el 12,5% de los puestos; y los empleos relacionados con compras, logísticas y almacén, que supusieron, en conjunto, un 11% del volumen total. El desglose por regiones de estas cifras permite apreciar una considerable brecha: Madrid y Cataluña suman 42.863 de estas ofertas, casi la mitad.
La tecnología, el mejor refugio
Predecir cuál será el sector que salga indemne de la próxima crisis es atrevido, pero la tecnología ha demostrado tener muchas papeletas. «Nuestra sensación cada vez que ha llegado un periodo de crisis, es que nos sentimos más protegidos frente a las ‘tormentas’ cuando hay destrucción de empleo. En este caso concreto, el estado de alarma ha requerido un aumento significativo de llamamientos para implantar soportes técnicos que nos están permitiendo trabajar desde casa», argumenta Sonia Poza, responsable de selección de personal en Izertis, consultora especializada en la transformación digital de otras empresas.
«En la actualidad el mayor número de puestos que el mercado está requiriendo son los perfiles de ciberseguridad, gente que se encargue de automatizar y virtualizar procesos y mucha ‘nube’ para el almacenamiento de datos y programas con mayor seguridad y eficiencia», especifica Poza. Las compañías también se rifan a los expertos en ‘blockchain’, automatizaciones e inteligencia artificial. «Los perfiles más difíciles de conseguir, antes y después de este estado de alarma, son los mismos, no han cambiado. Y esto abarca todo lo que sea muy nuevo o muy especializado», sentencia.
Más allá de los puestos de alta cualificación, dominar el entorno digital será clave para esquivar los próximos embates en todos los niveles. «Lo primero que debemos tener en cuenta es que la búsqueda de empleo desde casa no cierra las puertas a encontrar trabajo. Es una nueva oportunidad en la que es fundamental trabajar en nuestra imagen digital y aprender a aprovecharnos de las herramientas digitales que tenemos a nuestro alcance», apunta Ángel Saénz. A su juicio, tal proceso pasa por:
-Identificar las habilidades que piden las empresas.
-Recurrir a cursos ‘online’ para encontrar nuevas oportunidades.
-Poner a punto el perfil de LinkedIn.
-Apoyarse en las comunidades ‘online’.
-Perderle el miedo a las entrevistas virtuales.
Reig, de Welcome to the Jungle, apuesta por una fórmula similar: «Para enfocar la búsqueda de empleo en un contexto como el actual, lo primero sería tratar de entender cómo puede encajar nuestro perfil en los diferentes sectores que a día de hoy buscan candidatos. Por ejemplo, puede que un especialista en ‘marketing’ ahora mismo tenga dificultades para encontrar empleo en el sector del ‘retail’, pero sí encuentre ofertas para empresas del sector sanitario, de comercio ‘online’ o del sector digital».
«Si encontramos una oferta que nos interesa, también es importante pensar en adaptar nuestra candidatura para el puesto al que nos presentamos —matiza—, aunque también es posible que las ofertas disponibles no encajen con nuestro perfil o, sencillamente, que la contratación no llegue». En ese caso, lo único que está en manos del aspirante es revisar la manera en que está buscando trabajo y tratar de mejorar su perfil para que se adapte mejor a las necesidades de la candidatura. «La situación es complicada, pero es importante no tirar la toalla».